Making of de Musarañas, nuestro primer Goya
Musarañas es una cinta muy especial para Nadie Es Perfecto. Con ella, obtuvimos nuestras primeras nominaciones a los Goya y ganamos el primero. Hoy recordamos cómo fue el making of de Musarañas.
Rodada en un piso de Madrid
Ahora que se acerca la ceremonia de los Goya no podemos evitar recordar que con Musarañas obtuvimos nuestras primeras nominaciones en 2015: Mejor Dirección Novel (Juanfer Andrés y Esteban Roel), Mejor actriz (Macarena Gómez) y Mejor Maquillaje y Peluquería (José Quetglas y Carmen Veinat). La película ganó el Goya a Mejor Maquillaje y Peluquería y se presentó en la sección oficial del Festival de Sitges.
El rodaje de Musarañas duró 5 semanas, de diciembre de 2013 a febrero de 2014. Se realizó íntegramente en un piso antiguo de Madrid, el mismo que se utilizaría después en una secuencia de Orígenes Secretos.
Con Musarañas Juanfer Andrés y Esteban Roel se iniciaban en el largometraje después de su éxito con el cortometraje 036, que cuenta con más de 2 millones de visualizaciones en YouTube.
Macarena Gómez, el alma de Musarañas
Sin duda, la interpretación de Macarena Gómez es una de las joyas de la película. Se preparó el papel con un psiquiatra para entender bien los trastornos que tiene su personaje y, según sus compañer@s de reparto, estaba totalmente inmersa en el personaje –casi poseída- durante la grabación.
Para escribir el personaje de Montse los directores se inspiraron en el carácter de las mujeres de los pueblos españoles de los años 50. Mujeres muy marcadas por el peso de la religión que llevaban determinadas tradiciones, como el luto, hasta el extremo.
La historia
Musarañas se sitúa en la España de los años cincuenta. Montse (Macarena Gómez) ha perdido la juventud cuidando de su hermana pequeña, encerradas en un siniestro piso del centro de Madrid. Su madre murió en el parto de la pequeña (Nadia de Santiago) y el padre (Luis Tosar) no pudo soportarlo y huyó, dejándolas solas. Obligada a ser padre, madre y hermana mayor, Montse se esconde de la vida, entre cuatro paredes, alimentando un temperamento obsesivo y desequilibrado: padece de agorafobia y no puede dar un paso fuera de casa. Ella no entiende lo que le sucede y el sufrimiento que esa extraña enfermedad le genera la obliga a refugiarse en un mundo de Padrenuestros y Avemarías.
Montse trabaja de costurera y el único eslabón que la une con la realidad es la niña, una niña que está dejando de serlo. Un día, esa cadena se rompe: Carlos (Hugo Silva) un vecino joven e irresponsable, tiene la desgracia de caerse por la escaleras, buscando ayuda en la única puerta a la que ha sido capaz de arrastrarse. Montse le recoge. Alguien ha entrado en la madriguera de las musarañas… Puede que no vuelva a salir.